16 octubre 2017

la banca española se tensiona...

Sobre todo son los dos bancos catalanes, que no sólo cambien de sede social, sino de sede fiscal… La retirada de dinero de sus cuentas debe ser muy preocupante para que hayan actuado así de rápido. No dan cifras, pero les debe estar costando un huevo ya que hablas con quién hables, todo el mundo les está sacando el dinero, desde los de fuera de Cataluña, hasta los propios catalanes, que el miedo es ciego y contagioso… (que se lo pregunten al Popular)
Los grandes números son aterradores:

La tensión multiplica por seis la petición de liquidez de los bancos al BCE

El Banco Central recibió solicitudes de efectivo por 21.300 millones

La situación política sigue impactando de lleno en los bancos, sobre todo los que, como CaixaBank y Sabadell, hasta hace unos días tenían la sede en Cataluña. La prueba de esta tensión se reflejó este martes pasado en la subasta semanal del Banco Central Europeo (BCE), que recibió peticiones por parte de los bancos de la Zona euro por valor de 21.343 millones de euros. La cifra supone 5,6 veces más que la semana anterior, cuando se solicitó efectivo por valor de 3.240 millones de euros.
No se puede saber qué bancos han pedido tanto dinero porque las peticiones son ciegas, “pero todo parece indicar que son los dos bancos catalanes”, afirman expertos españoles del mercado. “El resto de entidades no están pidiendo dinero porque sobra con lo que entra de los depósitos, y en Europa no debería haber cambios frente a la tendencia de las últimas semanas”, añaden. Según datos oficiales, hubo 33 bancos que realizaron petición de dinero aunque se desconoce en qué cuantía.
Estos datos supondrían que los responsables bancarios creen que podrían continuar las retiradas de efectivo pese al traslado de las sedes de ambas entidades fuera de Cataluña por la incertidumbre ante el desafío independentista. “El dato de la subasta refleja una forma de acopiar liquidez por adelantado por lo que está pasando y para lo que pueda pasar en los próximos 15 días”, apuntan los expertos del mercado monetario.
Abrazos,
PD1: Encima, van y aplazan la creación del Fondo de Garantías Europeo. Como sabes, se optó por dar la supervisión bancaria al BCE y se empezó a crear un Fondo de Garantías para problemas de sus bancos… No hay saldo, ni en el FGD español, ni apenas en el europeo…

La CE aplaza 'sine die' el fondo europeo de garantía de depósitos

Se había fijado su puesta en marcha en 2024, pero Berlín mantiene bloqueado el proyecto

Bruselas plantea como alternativa un sistema de reaseguro sin mutualización de riesgos

La Comisión Europea renuncia a su objetivo de poner en marcha en 2024un sistema europeo de garantía de depósitos bancarios (hasta 100.000 euros por cliente), un proyecto bloqueado desde hace dos años por la resistencia de varios países encabezados por Alemania.
Bruselas ha planteado este miércoles como alternativa un sistema de reaseguro, que se limitaría a garantizar con préstamos la liquidez de los fondos nacionales de garantía de depósitos. A posteriori, en una fecha que se deja abierta, se podría iniciar la mutualización de riesgos, pero solo una vez que se haya avanzado en la armonización de los fondos nacionales y cuando se haya resuelto el lastre de la morosidad acumulada durante una década de crisis en la zona euro.
El vicepresidente económico de la CE, Valdis Dombrovskis, confía en que este primer paso, que define como "pragmático" sirva para despejar la inquietud de los países reacios y facilitar la instauración de un fondo europeo de garantía de depósitos. Pero Bruselas ya no se atreve a poner fecha para ese objetivo final.
El plan de la Comisión llega tras dos años de parálisis en las negociaciones del proyecto inicial, que aspiraba a una primera fase de reaseguro (hasta 2020) y una mutualización progresiva del riesgo hasta llegar al 100% en 2024.
La propuesta inicial de la Comisión, que data de noviembre de 2015, no ha avanzado ni un ápice, bloqueada por el ministro alemán de Finanzas, Wolfgang Schäuble, que exigía a cambio varias medidas para reducir el riesgo de las entidades financieras, como la limitación en la compra de deuda soberana o la obligación de provisionar la compra de bonos de los países de la zona euro más vulnerables.
La inminente salida de Schäuble del ministerio y el clima de concordia entre la canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente francés, Emmanuel Macron, abren un resquicio para el acuerdo que la Comisión va a intentar aprovechar aunque a costa de rebajar sensiblemente su primer proyecto.

Dos fases

Bruselas considera imprescindible la creación de un sistema europeo de garantía de depósitos, que otorgue la misma seguridad a todos los clientes de la unión bancaria con independencia del país de origen de su entidad. El sistema europeo permitiría, además, romper el círculo vicioso entre banca y Estado que arrastró a la bancarrota a países como Irlanda o que obligó a España a solicitar un programa de ayuda para la banca al fondo de rescate de la zona euro (MEDE).
Pero dada la desconfianza reinante en el seno de la UE y la presencia de casi un billón de euros en préstamos morosos en los balances de las entidades financieras, la Comisión aplaza sine die la cobertura europea total. Sugiere avanzar en dos fases, pero sin el automatismo para pasar de una a otra que preveía el proyecto de 2015.
La CE propone iniciar en 2019 una primera fase, con un sistema de reaseguro que podría cubrir hasta un 30% de las necesidades de liquidez de un fondo nacional de garantía. La cobertura se doblaría al año siguiente y llegaría a ser de hasta el 90% en 2021. En todo caso, se trataría de préstamos que deberían ser reembolsados por el sistema nacional.
Bruselas se compromete durante esa primera fase a impulsar medidas para reducir el riesgo bancario, con un plan para animar a las autoridades nacionales a resolver el problema de los préstamos fallidos o morosos. En 2022, como muy tarde, la CE llevaría a cabo una revisión sobre la calidad de los activos dudosos para verificar la condición de los balances y podría requerir medidas a los países o entidades más atrasadas en el saneamiento.
Al mismo tiempo, se avanzaría en la armonización de los sistemas nacionales de garantía de depósitos. Bruselas recuerda que todavía existen numerosas divergencias en conceptos tan esenciales como la definición de los depósitos cubiertos, la financiación de los fondos nacionales o la intervención de cada sistema de cobertura.
La Unión Bancaria tardará 20 años en completarse
Solo una vez que se hayan logrado esos dos objetivos (reducción del riesgo y armonización de los fondos), Bruselas propondría iniciar el tránsito hacia una segunda fase con la mutualización de riesgos.
En 2015, ese tránsito era automático a partir de 2020 y se llegaba a la mutualización del 100% en cuatro años. Ahora, se deja abierta la fecha inicial. Y se sugiere empezar con una cobertura europea de hasta el 30% pero sin fijar una meta para llegar al 100%.
Todo indica que el fondo europeo para completar la Unión bancaria no estará listo hasta finales de la próxima década, como pronto. Es decir, casi 20 años después de que los gobiernos aceptasen la transferencia de la supervisión financiera al BCE como primer paso hacia la Unión bancaria. Soberanía compartida, pero el riesgo para cada país.
PD2: Y desde Bloomberg dicen esta burrada:
Three years since their banking union began to take shape, European Union regulators are seeking fresh powers to deal with lenders in trouble. Their planwould let them stop withdrawals from a failing bank for a few days while they address the problem, with the aim of preventing a run. But this approach could easily have the opposite effect, spreading panic to the whole financial system. There's a better way.
Instead of freezing bank accounts, EU governments should enable regulators to keep a bank going while they restructure it and search for a new owner. This will require EU governments to commit additional resources for the task.
The European Central Bank and the euro zone's Single Resolution Board have been calling for the power to freeze bank accounts -- a so-called moratorium -- since the swift resolution of Banco Popular in June. They succeeded in winding down the troubled Spanish lender by selling it to rival Banco Santander, but had to do it on a weekday night with a run on deposits in progress. The regulators say that next time it might be impossible to find a buyer overnight. A moratorium would relieve that pressure and perhaps allow them to sell the bank at a better price.
This approach would mirror an arrangement which is currently in place in Germany, and it's superficially appealing: Closing a bank would certainly stop a run. But it could also have unintended consequences. Depositors may run from a bank in trouble sooner -- fearing that if they wait too long they may not be able to withdraw their money. It could also lead depositors to empty their accounts as soon as the bank re-opens. Most dangerous of all, freezing accounts in one bank could spread panic to the rest of the system, as other depositors fear the same will happen to them.
The idea also puts international cooperation on bank resolution at risk. The EU regulators' plan threatens to disrupt measures put in place after the bankruptcy of Lehman Brothers in 2008. Bank of England economists recently warned in a working paper that adopting the new moratorium might prompt banks to back out of the existing arrangements for handling financial emergencies.
Strengthening Europe's Single Resolution Fund is the better approach. The fund's planned capacity of 55 billion euros is too small, and even that amount won't be fully available for years. The EU should agree to make it bigger, and quickly. An adequately financed SRF would give regulators the chance to resolve failing banks without putting the financial system at greater risk. If it helps to head off the next banking crisis, the additional upfront cost will be money well-spent. 
PD3 Ya llega, ya…, la banca digital de las grandes corporaciones estadounidenses…
While the financial media has been preoccupied with the idea that the banking business is at risk of being “Amazon’d” by the blockchain, the banks themselves are worried about being “Amazon’d” by…well…Amazon…
Or at least they should be, as American Banker’s Lalita Clozel explains in a piece tracing large tech companies’ attempts to forge ties with banking regulators in anticipation of someday leveraging the vast quantities of customer data to outmuscle the banks in their own industry. Meanwhile, even the most optimistic cryptocurrency enthusiasts concede that blockchain technology continues to grapple with issues of scalability that, for now at least, will make it incredibly difficult to compete with banks.
A group of companies that includes Google, Facebook and Amazon recently formed a lobbying group to help them explore the feasibility of entering businesses like lending and loan-intermediation.
Technology giants like Google, Amazon, Facebook and Apple are showing an increasing interest in engaging with federal banking regulators, a move that underscores Silicon Valley’s growing involvement in the financial services arena. In recent years, such firms have formed a lobbying group, Financial Innovation Now, that is staking out their view on various hot-button topics. But some firms are also meeting individually with government agencies.
Furthermore, both Amazon and Square have taken meetings with the OCC.
For example, Amazon lobbyists met with the Office of the Comptroller of the Currency starting in the second quarter of 2016, and again this year to discuss “issues related to mobile payments and payment processing, financial innovation, and technology," according to publicly available lobbying disclosures.
PayPal, meanwhile, met with OCC officials in the second, third and fourth quarters of last year to discuss “mobile payment innovation” issues related to underserved customers and remittances and money transfers, according to its disclosures.
Even before this latest lobbying effort, both companies had already launched forays into small-business lending (Amazon’s SB lending businesses saw its revenue double over the past year). Apple, meanwhile, has for years been lending to customers hoping to purchase its products. But before deciding whether to expand their financial services offerings, tech companies must first understand what regulatory obstacles might exist.
“People are kicking the tires,” said Lawrence Kaplan, a bank lawyer of counsel at Paul Hastings. “People are asking questions: What does this entail? Can you get us up to speed if we want to pull the trigger?”
In the spirit of helping to shepard financial innovation, the OCC earlier this year created a national fintech charter that financial technology (and big tech) companies can use to circumvent certain restrictions, easing their transition into the financial-services business.
The charter, Clozel notes, was adopted after an aggressive lobbying campaign by large tech companies. One of the most logical applications for leveraging the vast troves of personal data routinely harvested by firms like Facebook and Amazon would be intermediation – or connecting customers with lenders for a small finder’s fee.
Large technology firms are “really interested in the intermediation piece, where you have access to all that data,” said Paul Nash, the former senior deputy comptroller and chief of staff under Comptroller Thomas Curry, who began discussing the possibility of a fintech charter early last year. “All of them are thinking about it.”
The next lobbying objective for big tech is to convince regulators to force banks to provide access to their financial data through an Application Programming Interface, or API, that would allow tech companies like Amazon to create almost instantaneous connections to banks’ transaction processing networks, allowing them to take over more consumer-facing businesses.
In summary, while many a think piece has been written about financial services companies and banks trying to become more like technology firms, the irony is that tech firms are also trying to be more like banks.
“There's been lots of interest by financial services firms in technology companies and fintech companies,” said Kevin Petrasic, a partner at White & Case. “Some tech firms are now looking in the other direction.”
In other words, it’s only a matter of time before Amazon Prime customers will be able to make purchases on Amazon’s marketplace using an Amazon credit card.
PD4: ¡Ni Jesús pudo convencerles...! ¡Qué misterio, el de la libertad humana! Podemos decir “no” a Dios...! El mensaje evangélico no se impone por la fuerza, tan sólo se ofrece y yo puedo cerrarme a él; puedo aceptarlo o rechazarlo. El Señor respeta totalmente mi libertad. ¡Qué responsabilidad para mí!